Aprovechando que hoy es el día de la mujer trabajadora, voy a romper una lanza a su favor. Creo que casi todos los hombres sentimos admiración y gratitud hacia ellas, por muchas y variadas razones; por contribuir a generar riqueza con sus trabajos remunerados, pero también por enriquecer a las familias con su labor desinteresada; por cuidar de todos sus niños, los pequeños y los mayores (sus parejas); por exponerse bailando en el centro de la pista mientras los hombres sujetamos la barra; por cuidar de familiares y enfermos con Amor y dedicación exquisitas, y cómo no, por todas las que gestan en sus vientres la vida que, en mi caso, me permite estar aquí y ahora, disfrutando la oportunidad de hacer lo que me gusta.
Creo que a estas alturas nadie duda de la capacidad de la mujer para realizar prácticamente cualquier labor, igual o mejor que un hombre. Sobradamente preparadas, están enraizándose con puestos de responsabilidad en nuestra sociedad muy rápidamente, políticas, empresarias, representantes sociales y culturales y un largo etcétera que nos aporta ese plus de inteligencia emocional que tanto falta en este mundo nuestro.
Desde lo más profundo de mi corazón, GRACIAS.
«El papel de las mujeres en el progreso de la civilización es mucho mayor que el del hombre, por lo que debería desarrollar sus aptitudes de acuerdo con su naturaleza, sin imitar a estos.» Alexis Carrel
Texto original de Miguel Ángel Pérez Ibarra para Emoconciencia