Un año más, inicio mi viaje hacia tierras mexicanas con renovadas ilusiones. Con el deseo de conocer más de la cultura, de sus gentes y de seguir profundizando en unas costumbres y gastronomía con las que disfruto tan intensamente. Siempre es un placer tener la oportunidad de enseñar algo de lo poco que uno sabe, y que lo reciban de una manera tan entusiasta.
Eso me recuerda a un perfil de persona muy concreto, y seguro que conoces alguna. Se trata de la eterna optimista, con una tendencia natural para dar lo mejor de sí misma en todo momento. Que siempre te saluda con ando te la encuentras llena ese instante de alegría, y por unos momentos, incluso te sientes impregnado de su vitalidad.
En el fondo creo que a todos nos encantaría poder comportarnos así. Imagina convertirte en algo significativo para otras personas, que tu presencia las estimule y que deseen encontrarse contigo simplemente por el optimismo que les transmites. Para eso hay que trabajar mucho pero, no hay mayor motivación para mí, que SER ese tipo de persona para ti…
Soy optimista. No parece muy útil ser otra cosa. Winston Churchill
Texto original de Miguel Ángel Pérez Ibarra para Emoconciencia