Existen emociones, sentimientos y sensaciones en las que, sin saber muy bien como, nos vemos inmersos. Momentos en los que las personas con las que compartimos esta maravilla denominada “vida”, nos proyectan miedos e inseguridades de las que nos sentimos partícipes, aparentemente, sin tener nada que ver con eso que nos cuentan o que percibimos en ellos.
Puedes mantener tu tranquilidad, en el fondo solo es un reflejo de la unidad, todos formamos parte de uno y cada uno de nosotros forma parte del resto; como consecuencia, siempre estamos haciendo de espejo de los demás. Este es un proceso programado y no-consciente por el cual, cada persona proyecta hacia su interlocutor sus propias sombras… Así que, en el fondo, lo que esa persona te está enseñando es que hay algo en ti, de lo que puedes tomar conciencia y, si así lo eliges, sacarlo a la luz.
A mi me gusta sentirlo como que cada persona que te encuentras es tu maestro perfecto, el que te muestra qué parte de ti puedes iluminar hoy y ahora. Eso también implica que tú lo eres para él o para ella, lo cual me hace creer sinceramente que es algo de lo que hay que disfrutar y sentirse orgulloso amigos, o mejor dicho, “Maestros”.
“Eres tú quién debe hacer el esfuerzo, los maestros sólo señalan el camino”. BUDA
Texto original de Miguel Ángel Pérez Ibarra para Emoconciencia.