Cada vez son más las personas que precisan una desconexión de su «yo» habitual, salir de su «zona de confort» para recargar pila y repasar las decisiones que han tomado para llegar donde están hoy, les guste o no los resultados que han creado. Tomar conciencia de los condicionamientos, la educación, los mandados y lealtades familiares que le han estado influenciando y, por supuesto, cambiar de rumbo.

No es fácil reconocer que  tomamos decisiones erróneas, pero los síntomas hablan por sí solos, son muchos y variados: mal genio, pérdida del sentido del humor, cansancio, desencanto, apatía, ansiedad o tristeza crónica. Cuando llevas días deseando que llegue el fin de semana para «desconectar«, es que ya no está disfrutando del resto de la semana, y eso es un problema importante, porque implica que la mayor parte de tu tiempo no te sientes bien.

En este retiro dejaremos las cosas claras, saldrás sabiendo dónde estás, hacia donde te diriges, y desde donde tienes que empezar a actuar para volver a sonreír como antes. Es una apuesta fuerte, pero también segura, siempre y cuando estés dispuesto a dejarte llevar por las dinámicas, ejercicios y juegos para tomar conciencia y llevarte el mejor regalo, una mejor versión de ti.